Cuando se prevea una modificación del uso que pueda alterar las solicitaciones previstas, será necesario el dictamen de un técnico competente.
Para evitar que puedan producirse condensaciones en las escaleras que estén dotadas de un cielo raso, se utilizará el hormigón adecuado al ambiente o se impermeabilizarán las piezas prefabricadas de hormigón, o bien se anularán las condensaciones mediante una ventilación apropiada.
En caso de quedar hierros al descubierto, las armaduras deberán protegerse con resinas sintéticas que aseguren la perfecta unión con el hormigón existente, nunca con yeso.
Si se observa la aparición de fisuras o grietas, se avisará a un técnico competente para que dictamine su importancia y, si procede, las medidas a tomar.
En caso de aparición de manchas de óxido, se avisará a un técnico competente.
La reparación de pequeñas erosiones o humedades no persistentes deberá ser realizada por profesional cualificado.
Toda manipulación de gran entidad de estos elementos deberá realizarse bajo supervisión de un técnico competente.
PROHIBICIONES
Las escaleras, salvo haberlo previsto con anterioridad, no estarán expuestas a humedad persistente ni a productos tóxicos o corrosivos.
No se realizarán perforaciones ni oquedades en las losas de hormigón pretensado diferentes a las prescritas por el fabricante.
Está terminantemente prohibida toda manipulación (picado o perforado) que disminuya su sección resistente o deje las armaduras al descubierto. En este último caso, nunca se protegerán con yeso las armaduras.
No se sobrepasarán las sobrecargas de uso ni las hipótesis de carga.
MANTENIMIENTO
POR EL USUARIO
Cada año:
Inspección visual observando si aparecen fisuras o cualquier otro tipo de lesión.